Publicado el 18/04/2022
Categoría: Tecnología

Por Virginia Álvarez Roldán, Head of Business Design de Baufest.

El científico de la computación británico Tim Berners-Lee, fundador del Consorcio World Wide Web (W3C), definió a la accesibilidad digital como el elemento que permite que “la información en línea sea usada, sin problemas, por la mayor cantidad posible de personas más allá de sus capacidades, habilidades, contextos, plataformas y dispositivos utilizados”.

De acuerdo con estimaciones del Banco Mundial, en la actualidad 1000 millones de personas en el mundo sufren algún tipo de discapacidad. En México, 5.7% de la población se encuentra dentro de este grupo, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Para empresas y gobiernos garantizar la accesibilidad digital de este sector de la población es un desafío que sólo puede ser afrontado situando a las personas en el centro e impulsando nuevos productos digitales, que todos puedan utilizar independientemente de su condición.

Enfocarse en este sector cobra mayor relevancia si consideramos que dos de cada tres personas con discapacidad confían en la tecnología para mejorar sus condiciones de vida y sus tareas diarias, según datos del estudio “Discapacidad, Integración y el papel de las TIC”.

Esta investigación del Observatorio de Discapacidad Física (ODF), también revela que 86.3% de las personas con discapacidad tienen teléfono móvil, 63% utiliza las redes sociales y una de cada cuatro cuenta con una computadora personal, lo que demuestra lo importante que es para esta población contar con acceso a la tecnología.

 Actualmente se cuenta con soluciones digitales diseñadas para que las personas con problemas de movilidad interactúen con dispositivos, permitiéndoles tanto disfrutar de diferentes opciones de entretenimiento para sus momentos de ocio, como realizar trámites administrativos, laborales y médicos.

También, existen aplicaciones que hacen posibles que las personas sordas realicen llamadas telefónicas, otras para conectar una pantalla braille para quienes padecen de discapacidad visual y algunas para estar al tanto de los avances en prácticas para autistas.

Además, desde la nueva área de campo denominada “wearables”, la cual consiste en la generación de “interfaces cerebro-máquina” para brindar alternativas de comunicación a las personas afectadas por enfermedades neurodegenerativas, se han creado herramientas que captan señales del sistema nervioso central para ser procesadas y decodificadas con Inteligencia Artificial (IA) y Machine Learning,  y de esta manera poder mover una silla de ruedas, utilizar una computadora o un procesador de texto, entre otras funcionalidades.

Y si bien estos avances, resultado de la innovación de los desarrolladores, son -sin duda- relevantes, empresas y gobiernos aún debemos garantizar que quienes tienen alguna discapacidad accedan a estas y otras tecnologías; sólo así, construiremos una sociedad igualitaria e inclusiva que aporte facilidades a todos los que la componen y especialmente, a los más vulnerables.

Apoyar y promover la inclusión digital también genera beneficios para las empresas. Les permite fortalecer su posicionamiento de marca y SEO, desde una visión inclusiva, pero también, demuestra su compromiso por luchar contra la discriminación y por la promoción de la igualdad de oportunidades.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.