Publicado el 14/10/2022
Categoría: Adulto Mayor
Adulto Mayor en la computadora con su nieto

“La mejor manera de prevenir los efectos de la menopausia y la osteoporosis es desde la infancia y no hasta que se presentan, situación que normalmente ocurre después de los 50 años. Existe una ventana de oportunidad que va del nacimiento a los 30 o 35 años, para generar el pico de masa ósea y así tener huesos sanos para la edad adulta y la vitamina D (VD) es fundamental para lograrlo. Si se cuentan con los niveles óptimos de esta vitamina desde edades tempranas, es posible prevenir algunos efectos de la menopausia prematura, además de reducir el dolor muscular y óseo que pueden presentarse también en esta etapa. Niveles óptimos de VD evitaría que una de cada tres mujeres mayores de 50 años sufra alguna fractura”.[1]

Doctor Víctor Mercado, jefe de la Clínica de Climaterio del Hospital Dalinde en la Ciudad de México

La llegada de la menopausia marca el final de los ciclos menstruales, esto normalmente ocurre alrededor de los años 50´s. Las mujeres presentan una disminución en la producción de estrógenos y experimentan algunos síntomas físicos y psicológicos como: períodos menstruales irregulares, sequedad vaginal, bochornos, escalofríos, sudores nocturnos, problemas de sueño, cambios en el estado de ánimo, aumento de peso y metabolismo lento, así como afinamiento del cabello y piel seca.

El doctor Mercado, menciona que la menopausia y la osteoporosis están muy ligadas. Cuando se llega a la menopausia, disminuyen los niveles de estrógenos, el proceso de recambio óseo se acelera y con éste el ritmo de pérdida de hueso. En la postmenopausia se pierde hueso a un ritmo más rápido que cuando existe actividad hormonal, por esto la osteoporosis afecta más a las mujeres que a los hombres.

Una buena noticia es que, si la mujer mantiene niveles óptimos de VD a lo largo de su vida y logra su pico de masa ósea, se previene la osteoporosis; además de desajustes relacionados con obesidad, dolores musculares, problemas cardiovasculares o diabetes.

Muchas veces a la osteoporosis se le llama «la enfermedad silenciosa» porque la pérdida ósea ocurre sin síntomas. Una persona no siempre sabe que tiene osteoporosis hasta que sus huesos son tan débiles que cualquier fuerza, golpe, o caída le causa una fractura o el derrumbe de una vértebra. Inicialmente se puede notar o ver una vértebra derrumbada cuando se sufre de dolor severo de espalda, disminución de altura, o deformidades espinales como la postura encorvada.

Algunas medidas preventivas son: contar con niveles óptimos de VD, llevar una dieta adecuada, realizar ejercicio dirigido, exposición responsable al sol, evitar caídas y realizarse anualmente una densitometría ósea una vez pasada la menopausia, señala el doctor Mercado.

Si la suplementación con VD es necesaria, el médico es quien debe prescribir la dosis adecuada para cada persona, de acuerdo con su edad, peso y niveles de VD, los cuales se determinan a través de un análisis clínico de laboratorio. En México se cuenta con una presentación de VD con experiencia en otros países por más de 15 años, que aporta varias ventajas: se alcanzan niveles óptimos entre cinco y siete días después de la toma y al no tener que tomarse todos los días, facilita el apego al tratamiento.

Referencia:

[1] Instituto Nacional de Salud Pública, Concentraciones séricas de vitamina D en niños, adolescentes y adultos mexicanos. Resultados de la ENSANUT 2006. P 12. Primera edición, 2011. ISBN 978-607-511-017-2

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