El principal objetivo de todo el tratamiento, desde la consulta inicial hasta la colocación de su prótesis fina, es restablecer la movilidad.
Información proporcionada por Ottobock, México
La amputación es la pérdida total o parcial de un segmento corporal y la función de éste, pueden ser tres sus principales causas:
- Congénita: Por nacimiento.
- Traumática: Debido a un arrancamiento o machacamiento generalmente causado por un accidente.
- Quirúrgica: Como consecuencia de alguna enfermedad como por ejemplo diabetes, cáncer, problemas vasculares, infecciones, etc.
La incidencia de amputaciones en nuestro país es cada día mayor y es de gran importancia conocer alternativas de protetización.
Una prótesis es un aditamento anátomo-mecánico que sustituye total o parcialmente un segmento corporal y la función de éste, por lo que el médico especialista es quien dará a la persona amputada el visto bueno para comenzar el proceso de protetización.
Existe gran variedad de opciones para la fabricación de una prótesis realizada por un profesional calificado teórica y clínicamente para diseñar, fabricar y adaptar prótesis y órtesis: el Licenciado en Órtesis y Prótesis.
Una buena valoración neuromusculoesquelética por parte de su protesista y una entrevista sobre las expectativas de la prótesis en la primera visita darán como resultado una serie de información específica para determinar cuál de todas las opciones existentes es la más adecuada.
Es importante saber que el proceso de adaptación protésica, consta de tres etapas donde todo un equipo de especialistas en rehabilitación interviene con su experiencia para una rehabilitación integral en beneficio de la persona amputada.
- Etapa preprotésica: Inicia en el momento en que el médico especialista toma la decisión de amputar un segmento corporal, todo el proceso de curación y rehabilitación de la persona amputada, hasta que está física y emocionalmente lista para comenzar el proceso de protetización.
- Etapa protésica: Inicia cuando la persona amputada llega a su primera entrevista con el protesista y dura todo el proceso de diseño, fabricación, adaptación y pruebas de la prótesis, ya sea de miembros pélvicos (piernas) o miembros torácicos (brazos).
- Etapa post-protésica: Inicia cuando su primer prótesis definitiva ha sido entregada, dando fin a la etapa protésica y su duración abarca hasta que la persona amputada decida usar su prótesis ya que tanto la persona como su prótesis requieren de una serie de enseñanzas, ejercicios, higiene, mantenimiento del muñón, de la prótesis, etc.
Existen diversas casas comerciales que ofrecen opciones técnicas básicas, intermedias y altas, incluso, componentes de acuerdo al nivel de actividad de la persona amputada a quien se le adaptará la prótesis para de esta manera permitir utilizar al máximo sus capacidades, no obstante de su discapacidad.
Algunas opciones:
- Pies protésicos convencionales, en fibra de carbono, con respuesta dinámica, con bombas de alto vacío integradas.
- Rodillas mecánicas simples, neumáticas, hidráulicas, electrónicas, monocéntricas, policéntricas.
- Caderas básicas o intermedias
- Ganchos y manos mecánicas o mioeléctricas
- Codos mecánicos, híbridos o electrónicos
- Hombros con tecnología básica o intermedia
- Adaptadores, tubos en aluminio, acero, titanio
Cualquiera que sea la elección, el usuario debe recordar que una parte muy importante de la prótesis es el socket, componente que une el muñón con el resto de la prótesis y que debe de ser fabricado con gran conocimiento de anatomía y biomecánica, adaptado de manera personalizada para que las ventajas técnicas sean aprovechadas al máximo por los usuarios.