Decretada recientemente por el Senado de la República, la Semana Nacional de la Salud Auditiva se celebrará en México los últimos días de febrero, y aunque está enfocada a la hipoacusia en niños, representa una gran oportunidad para detenernos a pensar sobre lo que podemos hacer para cuidar nuestra salud auditiva y la de las personas que viven con pérdida de la audición.
Según el INEGI, el 1.3 por ciento de la población de tres años en adelante no puede oír, y en mi opinión este número es bajo. Aun así, la falta de inclusión es alta, no se fomenta el lenguaje de señas, ni al paciente ni a sus familiares, ni se les otorgan facilidades educativas o laborales para ser incluidos.
La Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad reconoce a la Lengua de Señas Mexicana como una lengua nacional, lo que la convierte en patrimonio de la nación, además de impulsar políticas públicas que faciliten la vida de las personas que sufren esta discapacidad.
¿Y tú cómo apoyas a la inclusión de personas con discapacidad en tu negocio, empresa o vida diaria? Esta Semana Nacional de la Salud Auditiva es momento de hacer algo.
Son numerosos los retos que vive a diario un individuo con sordera o pérdida de audición; desde comunicarse y entender efectivamente los mensajes, hasta privarse de disfrutar de conversaciones con amigos o estar alerta del entorno. A esto se suma la discriminación involuntaria y agresiones por falta de sensibilidad en nuestra sociedad.